Vaya follón se ha montado con la sentencia de la Carrera Profesional.

A saber: antes siquiera de que la Ley 7/2007 entrase en vigor, esperando que las comunidades autónomas regulasen por ley una carrera profesional para sus funcionarios, el gobierno (o desgobierno) asturiano aprobó una resolución (sin rango de ley, por tanto) en la que se establecía un procedimiento para incorporarse a la denominada carrera profesional.

Ni en dicha resolución, ni en ninguna ley autonómica posterior, se dice en qué consiste realmente la susodicha carrera, pero sí se ofrecían a quienes manifestasen el deseo de incorporarse (durante un plazo de unos pocas semanas, que no se ha vuelto a abrir en dos años), la entrega de unas cantidades a cuenta, es decir, un adelanto de dinerito para los que se quisiesen acoger a esta movida.

Hubo sindicatos que intentaron que los docentes y otros funcionarios no firmásemos eso, pero la pela es la pela y el 80% de los docentes firmamos aquello. Así hemos venido cobrando un complemento de 2.500 € anuales los de secundaria y 1.600 € los de primaria.

Pero hete aquí que hubo sindicatos que interpusieron un recurso contencioso-administrativo contra dicha resolución. Y lo han ganado. Los sindicatos que tanto defienden a los trabajadores son CSI, CSIF y SUATEA.

La sentencia no dice nada de que haya que devolver esas entregas a cuenta, pero declara nula la resolución, precisamente por no estar amparada en ninguna ley vigente en el momento de su aprobación (la ley 7/2007 no había entrado en vigor, pendiente de ser desarrollada en cada comunidad autónoma) ni tener rango de ley para desarrollarla.

Voy a ir ahorrando lo que pueda, que a razón de 216 €/mes, van a venir mal dadas.