7 de septiembre de 2008


La calma y serenidad del Esla a su paso por Benavente contrasta con la locura vivida en las últimas vueltas de la carrera de Fórmula 1 de Spa.

Alonso terminó cuarto y Raikkonnen en el muro. Hamilton sancionado con 25 segundos, si le llegan a poner 30, se queda por detrás de Fernando.

Todos estábamos alucinando y echando pestes contra Renault por hacerle cambiar los neumáticos para tan sólo una vuelta, pero Alonso lo da por bueno y cuenta que se veía en el muro, por lo difícil que era pilotar el coche en esas condiciones. La verdad que si ese coche ya es complicado en seco, sobre agua debe de ser terrible.

Por cierto, por este puente pasa el Camino de Santiago del Sureste, del que ya hemos hablado en este blog.

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